Un 1 de julio comenzaba una aventura cargada de compromiso, responsabilidad y mucho corazón: la gestión de los Centros de Protección de Menores «La Torre» (San Bartolomé de la Torre) y «La Felicidad» (Villanueva de los Castillejos).
Tres años después, seguimos trabajando con la misma ilusión del primer día: acompañando, escuchando, cuidando y dando lo mejor de nosotros y nosotras para ofrecer un hogar seguro y lleno de oportunidades a quienes más lo necesitan.
Gracias a cada profesional, a cada niño y niña, y a cada persona que forma parte de esta gran familia.
Seguimos soñando juntos.